FuniMAT (Functional Inorganic Materials), el equipo de Carlos Martí-Gastaldo en el Instituto de Ciencia Molecular de la Universitat de València, forma parte de uno de los proyectos seleccionados por el programa RETOS-COLABORACIÓN (Ministerio de Ciencia, Innovación e Universidades), destinado a financiar iniciativas de cooperación entre empresas y organismos de investigación.
El objetivo de la convocatoria Retos-Colaboración, que se produce en el marco del Plan Estatal de I+D+i, es la financiación de proyectos de cooperación entre empresas y organismos de investigación, con el fin de promover el desarrollo de nuevas tecnologías y la aplicación empresarial de nuevas ideas y técnicas, así como contribuir a la creación de nuevos productos y servicios.
El grupo FuniMAT constituye, en este caso, la base del proyecto AMBICOAT, dedicado al desarrollo de recubrimientos basados en compuestos organometálicos para la mejora de la calidad del aire en ambientes interiores. Para su desarrollo, trabajarán en consorcio diferentes empresas e instituciones: la Asociación de Investigación de Materiales Plásticos, la Asociación de Investigación de las Industrias Cerámicas, el Grupo Keraben, las empresas Omar Coatings y Pectro, y la Universitat de València.
En este marco, FuniMAT desarrollará nuevos materiales porosos para el control de la contaminación en ambiente interior, que las entidades colaboradoras del proyecto integrarán en sus productos comerciales. Dichos materiales han sido producidos en el marco del proyecto ERC Starting Grant liderado por Martí-Gastaldo, y se encuentran protegidos por una patente copropiedad de la Universitat de València y la Universidad de Granada, licenciada por estas instituciones académicas a la empresa spin-off MatCo –en el Parc Científic de la Universitat de València–, en línea con los objetivos de transferencia del conocimiento que caracteriza a la Universidad del siglo XXI.
FuniMAT es un grupo de investigación en la interfaz entre la química inorgánica y la química de materiales, dedicado al diseño de nuevos materiales porosos avanzados para su implementación en aplicaciones de interés medioambiental. Su principal objetivo, según Carlos Martí-Gastaldo, investigador responsable del grupo, “es facilitar las aplicaciones basadas en estos materiales, como la catálisis, la fotocatálisis, la electrocatálisis o el almacenamiento de energía, de cara a una nueva generación de dispositivos electrónicos porosos o a la conversión de energía solar”.
El proyecto AMBICOAT tiene una duración de tres años. Para su desarrollo, el programa RETOS ha destinado poco más de un millón de euros.
